
El comienzo de año no salió como estaba previsto. El equipo del norte de Alemania no pudo sumar su segunda victoria consecutiva y cayó 2-0 el sábado pasado ante Union Berlin. En el último encuentro del 2020, Werder puso fin a una racha de cuatro derrotas con una victoria de 1-0 ante Mainz y luego logró un convincente triunfo de 3-0 contra Hannover 96 de la segunda división en la Copa DFB, un día antes de Nochebuena. "Fue una actuación realmente mala y merecíamos perder", dijo el entrenador Florian Kohfeldt después del partido contra Union. "No hicimos nada de lo que queríamos presentar". De este modo, Bremen perdió la oportunidad de alejarse de la zona de descenso y quedó a cuatro puntos de la repesca.
Werder igualó un curioso récord de la Bundesliga a principios de temporada que anteriormente sólo había tenido Bayer 04 durante casi 40 años, pues consiguió cinco empates de 1-1 consecutivos entre la cuarta y la octava jornada. La única ocasión en la que un equipo de la Primera División del futbol alemán consiguió el mismo resultado fue el Werkself en la campaña 1980-81, también con resultados de 1-1.
La mayor fuente de esperanza para Bremen llegó al campo ante Union en el minuto 76 vistiendo la camiseta con el número 11: Niclas Füllkrug regresó tras dos meses lesionado. Y aunque no pudo modificar el marcador, las expectativas son altas para el prolífico delantero. El jugador de 27 años marcó cuatro goles en los primeros cinco partidos, aunque entró como suplente una vez y abandonó el campo en otro juego. Hay muchas esperanzas de que su regreso tenga un efecto similar al de la temporada anterior, cuando se lesionó después de un comienzo impresionante y luego jugó un papel decisivo al final de la campaña para asegurar la estancia en la máxima categoría. Los 40 minutos ante Union fueron, según el técnico Kohfeldt, "lo máximo" tras su larga pausa. Hay pocas esperanzas de que Füllkrug comience contra el Werkself.
La situación es algo mejor con Davie Selke, que logró jugar 45 minutos la jornada anterior y ahora también es candidato para iniciar en la delantera contra Leverkusen. "Estoy feliz de que estén de regreso porque nos dan otra opción", dijo Kohfeldt sobre el retorno de sus delanteros. Eso también es importante, ya que Bremen apenas ha tenido alternativas con el joven estadounidense Josh Sargent al frente. Milot Rashica también se perderá el partido del fin de semana debido a una lesión en el muslo y Nick Woltemade causó baja por una infección viral.
Este sábado en el BayArena se darán cita los dos equipos con mejor tasa de conversión de ocasiones claras en la Bundesliga. El Werkself lidera esta categoría con un 63 por ciento y Werder Bremen es segundo con un 53 por ciento. A pesar de los grandes problemas en el ataque, Werder se las ha arreglado para ser efectivo. Además de Füllkrug, Selke, Rashica y Sargent, el extremo Leonardo Bittencourt y el mediocampista Maximilian Eggestein han demostrado ser buenos en el remate. Cuando muchos jugadores están marginados, el equipo se puede auxiliar con Eren Dinkci, de 19 años, quien sólo necesitó cinco minutos después de entrar en su primer partido de la Bundesliga ante Mainz para marcar su primer gol, lo cual resultó ser un reflejo de la eficiencia de Bremen.
Esa fuerza también expone una debilidad al mismo tiempo. A pesar de la buena tasa de conversión, el Werder sólo ha marcado 16 goles, muy pocos dada su sólida alineación ofensiva, pues se coloca en posiciones peligrosas con poca frecuencia como para poder hacer uso de su fuerza en el cierre. En la Bundesliga, sólo Schalke y Bielefeld han creado pocas ocasiones claras y el Bremen también tuvo oportunidades limitadas contra Union Berlin. La salida de Davy Klaassen al Ajax en verano ha dejado un gran vacío en el mediocampo.
Nadie puede negar que el equipo tiene la calidad suficiente para mantenerse en la máxima categoría. Werder Bremen empató a uno ante FC Bayern hace un mes y medio, además tuvo buenas posibilidades de ganar el partido. Ahora se trata de evitar la tensión de la primavera pasada cuando sobrevivieron en los play-offs. "El equipo demostró que está dispuesto a hacerlo cuando las cosas se vuelven mucho más estrictas y críticas", explicó recientemente el director deportivo, Frank Baumann.

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